Iquitos renace

Muchas veces algunas ciudades o destinos son victimas del efectivo, pero también contundente, boca a boca. En una época en la que que vivimos en base a las experiencias de otros, en las historias que colegas viajeros han vivido y que sin menospreciarlas son únicas pero subjetivas. Iquitos tuvo su era dorado con el boom del Caucho y luego se mantuvo a merced de un crecimiento orgánico y posiblemente poco ordenado. Hoy, Iquitos se mantiene erguida y sin ser destronada, es la ciudad capital de la Amazonia peruana. Hoy Iquitos renace para mostrarse al mundo y se proyecta para convertirse en una destino exótico y único.

Durante este viaje combinaremos algo de ciudad y como no, algo de naturaleza. El plan ideal es de tres a cuatro días. Uno o dos en la ciudad y mínimo dos en los albergues o lodges que se han instalado en la cuenta del rio Amazonas.

Con una trayectoria impecable, el famoso Hotel El Dorado en la mismísima Plaza de Armas, tomo como apellido la reconocida marca Hilton para convertirse en el primer hotel de esta categoría en la ciudad. Su diseño se inspira en la cultura local y sin duda representa un logro arquitectónico ya que rescatando el edificio original hoy es un referente del diseño adaptado a las necesidades el viajero moderno y buen gusto.

Ya instalados en El Dorado Doubletree by Hilton desplazarse por Iquitos es muy fácil. Los principales atractivos de la ciudad están a un paso. Lo primero podría ser caminar hacia el malecón y tomarse fotos con las emblemáticas casas y edificios cubiertos por mosaicos y pepelmas europeas. Existen algunos monumentos singulares y un mercado de artesanías muy surtido. Al final del Malecón frente a la Casa Morey está un Barco Museo que permite conocer un poco de historia acerca del pasado iquiteño.

Las opciones para almorzar no son muchas pero las que hay lo dejaran sin palabras. Para comida típica, la Cecina y el tacacho, se recomienda El Fitzcarraldo ubicado al pie del malecón.

Ya por la noche también se puede aprovechar para probar otros manjares o las bebidas exóticas muy conocidas en la selva. Una experiencia única es visita Al frio y Al Fuego, un restaurante con barra y piscina instalado en la mitad de una afluente del rio. La ruta puede seguir en los bares aledaños a la plaza y finalmente cerrar la noche en la popular NOANOA, la discoteca más conocida de la ciudad.

En la Selva el calor hace que todo empiece mas temprano. Esto nos obliga a organizar cada día desde los primeros rayos de luz así que nuestro traslado a cualquiera de los lodges a las afueras de Iquitos debe programarse máximo 8am. El promedio de viaje por bote es de una hora máximo.

Tenemos dos propuestas para elegir o combinar

El Irapay Amazon Lodge se encuentra a 7km de Iquitos en una zona llamada Padre Cocha. Sus instalaciones pueden ser consideradas una de las más modernas de esta parte de la selva, sus bungalos están alineados alrededor de una gran piscina con diferentes profundidades y un poolbar. Cuenta con un rustico mirador ideal para disfrutar de hermosos atardeceres. Su restaurante ofrece una carta con productos locales que varia día a día.

A orillas del mismísimo Rio Momón y un poco más adentrado en la selva, el Amazon Garden Eco Lodge cuenta con un ambiente familiar con cabañas pintorescas en donde destaca la artesanía local. Sus dueños mantienen estrecha relación con las tribus y comunidades vecinas ofrecieron visitas de mediodía y completo. El mismo hotel incluso sirve de refugio para animales rescatados que corren libremente y con los que uno puede interactuar.